lunes, noviembre 11, 2019
CÓMO DUELE...
... Ese golpe (tan bajo) de estado contra Evo.
Sucedió.
Para muchos era de esperar.
Yo no acabo de asumirlo como hecho real. Pero lo es.
Evo ha sido víctima de un golpe de estado.
¡Cómo duele!
Una vez más la mano sucia y ensangrentada del imperialismo hace su labor contra gobiernos progresistas encabezados por hombres de pueblo.
Por ahora no diré más. Me voy a esas redes, desde donde espero emerja cada vez más y se acentúe el clamor unido de todos los que amamos la paz, el progreso, el bienestar... de todos los que estamos en contra de la violencia y de la violación impune de los más elementales preceptos del derecho internacional.
Me voy a las redes convencido de que Evo no está solo y, sobre todo, de que no podemos dejarlo solo.
Sucedió.
Para muchos era de esperar.
Yo no acabo de asumirlo como hecho real. Pero lo es.
Evo ha sido víctima de un golpe de estado.
¡Cómo duele!
Una vez más la mano sucia y ensangrentada del imperialismo hace su labor contra gobiernos progresistas encabezados por hombres de pueblo.
Por ahora no diré más. Me voy a esas redes, desde donde espero emerja cada vez más y se acentúe el clamor unido de todos los que amamos la paz, el progreso, el bienestar... de todos los que estamos en contra de la violencia y de la violación impune de los más elementales preceptos del derecho internacional.
Me voy a las redes convencido de que Evo no está solo y, sobre todo, de que no podemos dejarlo solo.