sábado, septiembre 17, 2016
REENCUENTRO
Ese joven que se detuvo, cuando vio a René González
Sehwerert en pleno bulevar avileño, giró completamente en U y, con la modestia
de sus bisabuelos, le pidió al Héroe cubano tomarse una foto, juntos…
Ese joven desconocido —que minutos después, cuando giré yo
en U y le fui encima para saber su nombre—
aún tenía erizada la piel de los brazos… por abrasada emoción.
Ese joven que vino a Ciego de Ávila (desde Las Tunas, ¡vaya
coincidencia!) quién sabe por qué motivo; tal vez en funciones de la empresa
donde trabaja, DESOFT…
Ese muchacho, que seguramente anoche, antes de acostarse,
miró otra vez su imagen junto a René: la misma que enseñará orgulloso a amigos
y familiares cuando regrese al oriente cubano…
Ese bendito muchacho me recuerda al Pastor Batista Valdés de
los años 80… desde el corte del cabello hasta el pedacito de interior que, a la
carrera, alcancé a verle, mientras anotaba su nombre (Yazmani Peña García) y
por su rostro se derramaba esa luz natural de gratitud, que llevan dentro
tantos seres humanos… tan cierta como el Sol.
Bienvenido Osvaldo
Quizás otro, u otra,
hubiera sentido asombro. A mí lo que me provocó la noticia fue tremenda
satisfacción.
Hacía apenas unos
minutos, a mi amigo Osvaldo Sánchez Naranjo le habían entregado el carné del
Partido.
¿Y eso qué tiene de
extraordinario? —se preguntará usted.
Por supuesto que nada.
Cientos, miles de cubanos, de distintas edades, sexo, origen, creencia, ubicación
geográfica, nivel cultural... ingresan cada año a las filas del Partido
Comunista de Cuba.
Solo que a Osvaldo no
lo propusieron sus compañeros de oficio, o los de la cuadra donde vive, aunque
es bueno reiterar que todos, al menos todos los consultados en distintos
escenarios, respondieron con inequívocas muestras de alegría y de aprobación.
No. Con su medio siglo
de calendarios en el costillar —tiempo suficiente como para ir prefiriendo ya
más tiempo (de merecido descanso)— Osvaldo pidió, por voluntad muy propia, que
la organización de base analizara la posibilidad de crecer con él.
¿Y tiene, realmente, eso
algo de inaudito o de extraordinario? —podría preguntarse, otra vez, usted.
Y vuelvo a ofrecer
criterio: No lo creo, aún cuando —y en ello coincidiremos— no son estos los
casos que más abundan... a pesar de que estamos hablando de una vía, una
posibilidad abierta a cualquier ciudadano, en cualquier parte de este país.
Pero el caso puede
tornarse mucho más curioso e interesante, si se conoce que, por razones
totalmente ajenas a su deseo, transparencia y voluntad, nuestro amigo había
dejado de ser militante, años atrás, aunque en la práctica lo siguió siendo, en
el ejercicio de la profesión, en formas y normas de comportamiento.
¿Qué pudo motivar a mi
amigo para solicitar que se le hiciera el proceso, si así lo consideraba el
núcleo de su centro de trabajo? ¿Aspiraciones de cargo? ¡Ni pensarlo! Ya los tuvo y ni en aquel entonces ni ahora
los ha buscado. ¿Proyectar una imagen más convincente o confiable? Tampoco,
pues goza del respeto y del cariño de quienes le acompañan, así como de
indiscutible confianza por parte de quienes lo dirigen. ¿Obtener algún otro
beneficio? Quienes lo conocemos, bien sabemos que no.
El es, sencillamente,
uno de los tantos avileños que sí cree en el Partido, ve y siente la necesidad
de su existencia y de su fortalecimiento interno, uno de esos que llaman a las
cosas y a las personas por su nombre, en el momento, forma y lugar adecuados.
Lástima que algunos y
algunas no piensen ni actúen igual. Hablo de los, y las, que piden
desactivación del Partido, casi siempre sin argumento propio y convincente, o
de quienes esquivan el tránsito hacia su seno desde la Unión de Jóvenes
Comunistas… como si la sociedad pudiera dirigirse sola, a ciegas, indiferente a
sí misma o peor aún: fraccionada.
En fin, a esta hora
nuestro claro amigo debe haber recibido numerosas felicitaciones, algún que
otro chiste de cubana marca, bien intercalado, y quien sabe si hasta la
socarrona risita exteriorizada por quienes, pidiendo pluripartidismo (desde
ultramar), generando apatías y evocando otras “modernidades” tan viejas como la
maldad que engendran, lamen la misma lengua que “raja” del Partido, con la
esperanza de verlo partido en pedazos.
Por fortuna, hay
mayoritaria claridad en Cuba acerca de ese asunto, hombres como Héctor Paz
Alomar, ya jubilado pero puntal activo en su núcleo, o quienes, como Osvaldo,
dicen: cuenten también conmigo, aquí estoy.
(Tomado de mí mismo en TVA)
viernes, septiembre 02, 2016
FIDEL EN ESTADOS UNIDOS
Las 17 imágenes que, tomadas
por el lente de Roberto Chile, conforman la exposición Fidel es Fidel,
continúan acaparando la atención en ciudades norteamericanas.
Despachos del Comité Internacional Paz, Justicia y Dignidad a los Pueblos, divulgados
por el Instituto Cubano de amistad con los Pueblos (ICAP) adelantaron, desde hace varios días,
la apertura de esa muestra en el Havana Cigars, de Atlanta, Georgia (3 al 15 de
agosto), mientras en Hayward California podría ser apreciada desde los últimos
días del propio mes.
Con patrocinio de la Alliance for Global Justice y del mancionado
Comité Internacional, la expo sería inaugurada también en el Global Justice
Center, de Tucson Arizona (viernes 26); para dar paso a Cork Factory, Baltimore
Maryland (10 y 11 de Septiembre), y al Community Media Center
of Marin San Rafael California, 9 de Diciembre.
Por su parte el sitio
digital elcomunista.net afirma que aún están
por confirmar ciudades como
San Franciso, Chicago, Nuevs York, San Diego, Berkeley, Pittsburgh, Milwaukee,
y subraya los más de 600 intentos de atentados contra la vida del Comandante en
Jefe de la
Revolución Cubana, a quien califica como Heroico y Amado Líder.
Como se sabe, Fidel es Fidel, fue presentada el pasado 12 de Agosto, víspera del
90 cumpleaños del Líder histórico de la Revolución cubana, en el Parque Militar Morro
Cabaña, de La Habana
y llegará a numerosos países, entre los que están Australia, Bélgica, Bolivia,
Brasil, Canadá, Colombia, China, Islas Canarias, Gran Bretaña y México.