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El entrañable nexo cultural que siempre ha unido a los pueblos de México y Cuba, remonta nuevos horizontes tras la visita a Las Tunas de Junípero Cabrera Berrones, director del museo histórico de Sierra Gorda, en el estado de Querétaro.

Acompañado por el médico, colaborador periodístico y promotor cultural Manuel Olvera Marín, Junípero viajó hasta la ciudad de Las Tunas interesado en contactar con la Casa Iberoamericana de la Décima (CID), para conocer detalles acera de la fecunda actividad que realiza esa institución a favor de la música campesina y, en particular, las experiencias en la formación de niños repentistas que cultivan la décima y el verso improvisado.

Durante su breve pero fructífera estancia, los visitantes accedieron a materiales en soporte digital e impreso, relacionados con la música, tradiciones, costumbres y características de la fiesta cumbre del campesinado cubano: la Jornada Cucalambeana, a cuya edición número 41 se prevé asista una nutrida representación de versadores y huapangueros, según documento de intención firmado con Ramón Batista, director de la CID.

Sensible huella dejó la presentación “formalmente informal” del Conjunto Cucalambé, cuyos integrantes interpretaron piezas y tonadas genuinamente campesinas y acompañaron a niños repentistas formados en el taller especializado con que cuenta la Casa tunera.

El encuentro demostró las amplias posibilidades que también se abren para el intercambio cultural entre artistas de la plástica queretana e integrantes del proyecto Perspectiva, particularmente en el campo de la pintura con dimensiones muy pequeñas (obras en miniatura).

Antes de partir, ambos visitantes agradecieron las atenciones y consideraron como muy valiosas las experiencias y la contribución que Las Tunas puede ofrecer para rescatar, preservar o revitalizar en esa región de la geografía mexicana géneros como el son arribeño y el huasteca, que, como la décima y la música campesina en Cuba, forman parte de la identidad cultural del hermano pueblo azteca y tienen un fuerte arraigo popular.

Ubicada al norte del estado mexicano de Querétaro, la Sierra Gorda llama la atención por su rica biodiversidad natural, expresada en la coexistencia y preservación de numerosos ecosistemas que constituyen Reserva de la Biosfera.